Sobre Mí
¿Quién soy? ¿Qué soy? Cómo responder a eso sin pensar en el peso de los sueños que quedaron a mitad de camino, sin mirar las grietas de lo que alguna vez me definió y hoy ya no existe. Me llamo Florencia y escribo, pero eso es tan solo una parte.
Soy. Ahora, en tiempo presente. Un momento capturado en un trayecto de cambio constante, de transformación, de búsqueda. Soy la nostalgia de un pasado que se vuelve difuso y ficticio por la memoria, una pregunta constante acerca del futuro y soy, también, el abismo que se abre entre ambos.
Mis poemas nacen de las sombras, de las pesadillas, de las alas que no siempre sirvieron para volar. Me muevo en esos territorios con la comodidad y desesperación de un animal enjaulado: dócil, inquieto, impredecible.
Intento hacer tangible a través de mis palabras lo que siento; trasladar al mundo lo que resuena adentro mío y no consigo expresar de otro modo. El miedo, que me vuelve difusa e imprecisa en mis vínculos con los demás, es también el motor que me impulsa a ver, a escuchar, a sentir.
Escribir es como despertar con el recuerdo de un sueño maravilloso que se me escapa de las manos. Es la búsqueda imposible, el intento constante y siempre insuficiente de querer atrapar la realidad con palabras, de querer traducir la imaginación, de tratar de tocar la verdad. Escribo porque la palabra me libera, porque me hace sentir viva y plena, porque es la única manera en la que puedo respirar. Escribo porque me expando, me transformo, me multiplico; porque todo se vuelve posible y habitable; porque necesito, al final del día, mirarme a los ojos y poder reconocerme.
Te invito a pasar y leerme, a que caigamos juntos en los abismos y nos perdamos en el caos y la potencia de las emociones. Si alguna de mis palabras resuena también en vos, entonces habremos construido un puente que nos vincula desde nuestra vulnerabilidad y anhelos. Y qué otra cosa es la vida más que esta red infinita de lazos que nos permite conectarnos con los demás.
Pasá, leé, ponete cómodo: todas estas palabras también pueden ser las tuyas.